
Salir de la crisis
Para nadie es un secreto que atravesamos momentos difíciles en el futbol mexicano. Estamos en una profunda crisis tanto a nivel selecciones como a nivel clubes. Muchísimas decisiones han provocado malos resultados y crisis económicas en varios clubes de Primera División.
Hay equipos que solamente están por estar, sin ninguna exigencia. Y otros que quisieran siempre estar peleando por títulos están muy lejos de poder hacerlo. Para salir de la crisis en la que estamos se necesita de tiempo y continuidad en los procesos.
Los clubes deben debutar a más jugadores en Primera División y en la Selección deben estar los mejores, porque un equipo nacional no es para probar, es para los mejores que ya lo hayan demostrado.
Jaime Lozano tiene poco tiempo al frente del equipo y ya tiene críticas encima por los dos empates ante Australia y Uzbekistán, dos países a los que antes se les ganaba con facilidad. México ha dejado de producir buenos jugadores en varias posiciones claves.
Portería, defensa y delanteros es algo que se extraña. Además que los actuales seleccionados no tienen la personalidad que tenían con anterioridad en otras épocas. Para salir de la crisis es vital que los dueños y directivos acepten que las cosas no caminan bien.
Si ellos no lo aceptan será difícil encontrar el camino correcto. Hay que volver al ascenso y descenso y por supuesto que a bajar el número de extranjeros por equipo. El negocio del futbol llega a perder cuando solamente se piensa en lo económico y no en lo deportivo.
Que en los clubes obliguen a debutar a jóvenes de 18 años y que sigan con un proceso de formación serio. Y que los entrenadores reciban el apoyo de su directiva para poder hacerlo. El ejemplo del Pachuca es el más claro de cómo hacer las cosas.
Se le dice a Guillermo Almada que tome el tiempo necesario para formar un equipo competitivo luego de salir campeones y vender a todos los jugadores. Paciencia y respaldo es lo que siente el técnico uruguayo.
Lamentablemente, como Pachuca hay muy pocos ejemplos. Urge salir de la crisis donde el aficionado ha dejado de creer en el futbol. Muchos ya se sienten decepcionados y voltean a otras aficiones para olvidar el balompié.
No es broma, estamos en una profunda crisis de credibilidad, jugadores, entrenadores y resultados. Urge poner un hasta aquí para volver a construir nuestro futbol. Aquí, pues, algunos consejos para salir de la crisis.