La nula preocupación de Octavio Romero por el medio ambiente se remonta a 2000-2005.
México va tarde a sus compromisos internacionales para bajar sus emisiones contaminantes y la principal “fuente” es Pemex, considerada como la décimosegunda más contaminante del mundo; sus emisiones de metano superan hasta ocho veces a las que producen más petróleo, según un estudio de México Evalúa. En 2022 emitió 780 mil toneladas de metano, 320 por ciento más respecto de 2018 (185 mil 600 toneladas). De ahí a la fecha se reportan constantes fugas, derrames y accidentes, puntualiza dicho análisis.
Otro estudio, publicado por la organización InfluenceMap, sitúa a Pemex como una de las más contaminantes de los últimos 168 años. De 122 entidades de la industria energética, la mexicana ocupa el lugar 12 en contaminar. No obstante, en 2019 la empresa –que dirige el agrónomo Octavio Romero Oropeza– incrementó sus emisiones.
Una de las malas prácticas es el bloqueo a proveedores internacionales que cuentan con certificación, para otorgar contratos a empresas “amigas” que incumplen y ponen en riesgo la integridad de trabajadores y población civil. Los responsables, con la anuencia del titular de Pemex, son el director corporativo de Administración y Servicios, Marcos Manuel Herrería Alamina, y el jefe de Proyectos del Instituto Mexicano del Petróleo, Félix Domínguez. A ello se suma la falta de mantenimiento a instalaciones estratégicas y el adeudo a proveedores.
Cabe recordar que la nula preocupación de Romero Oropeza por el medio ambiente se remonta al periodo 2000-2005, cuando era oficial mayor en el entonces DF, y vendió terrenos contaminados a Elvira Daniel Kabbaz Zaga, sin exigir medidas de mitigación, lo que causó la contaminación de pozos profundos de agua en la capital.
La crisis económica y la deficiente calidad de los insumos no sólo ha dañado el medio ambiente, sino también la reputación de Pemex. El reto no será sencillo para la próxima administración que encabezará Claudia Sheinbaum.
DENUNCIAS CONTRA EL SAT
Nos informan que un grupo de empresarios ha presentado una serie de denuncias, dirigidas a la titular de la Segob y al jefe del Servicio de Administración Tributaria, que exponen una presunta red de corrupción dentro del organismo, que implica a altos funcionarios. Las acusaciones señalan a Erick Jiménez Reyes, administrador general de Auditoría de Comercio Exterior, del SAT, por supuestamente liderar prácticas que incluyen exigencias de sobornos y amenazas de revocaciones de certificaciones empresariales. Los empresarios afectados reportan extorsiones y pagos en efectivo para evitar represalias y destacan la urgente necesidad de adoptar medidas de confianza institucional para restaurar la credibilidad del sistema fiscal mexicano.
CONFIANZA DE LA IA EN MÉXICO
Con el surgimiento y la consolidación en el mundo de la inteligencia artificial (IA), gracias al uso de sus plataformas y su automatización, organizaciones mexicanas han incrementado la productividad de sus equipos beneficiándose de utilizar el contexto (topología, transacción y la información a nivel de código) para identificar la “causa raíz” de los problemas y adoptando acciones para solucionarlos, incluso, de manera anticipada y con seguridad. Gabriel Prioli, ingeniero de soluciones de Dynatrace para América Latina, destacó ante representantes de empresas públicas y privadas del país los beneficios de la expansión de la IA predictiva, causal y generativa, lo que aumenta la productividad en los equipos de negocios, desarrollo, seguridad y operaciones. Hoy existen plataformas como Davis CoPilot, pionera de la llamada inteligencia artificial hipermodal, con el fin de crear consultas, tableros y cuadernos de datos sin mayor esfuerzo, así como utilizar un lenguaje natural y proporcionar sugerencias de codificación para la automatización de flujos de trabajo, reflejando los atributos únicos del ecosistema híbrido y multinube de cada cliente. No cabe duda que la confianza de los inversionistas en México marcará el futuro de la IA en el país.
